Gracias a la vista ninja de estos compas, descubrimos que hay una rajita en la máscara de Tobi. ¡Oh vaya! En realidad sí significa mucho. Konan y el Cuarto has sido los únicos shinobis conocidos capaces de hacerle algún daño visible a Tobi. Una marca, por más pequeña que sea, es una gran recarga moral para nuestro cuarteto.
Ochocolas se lanza al ataque (por fin, eh, que estuvo ahí nomás parado por mucho tiempo) pero Máscara-man convoca una impenetrable barrera al rededor del mazô. Mientras tanto Kakashi comienza a crear una hipótesis misteriosa con su IQ de milochomil. Concluye que lo mejor será comprobarla, así que se le avientan volando con total agresividad.
¡Y bum! Le revientan la espalda. 'Ora sí se armó. Aquí comienza la batalla. Me emociona y me estimula mucho que esta pelea se ponga reñida, no en sí porque quiera ver a Naruto triunfar, sino más bien porque ya hace falta una batalla que se sienta grande e importante. Es que si bien esta guerra ha tenido ya sus muchos momentos grandiosos, al final quedan sintiéndose como irrelevantes cuando se considera que vencer a los zombis en realidad no tenía tanta importancia, con eso de que Itachi los terminó deteniendo.
Pero, esperen... "un momento", dice Kakashi-sensê. Ha notado unas coincidencias sospechosas entre las técnicas de Tobi. Que qué que qué. Que es sólo un jutsu y que ya descifró cómo funciona, oooh cielos. Explícanos, Kakashi, por favor. ¿Que qué que qué? ¿Que hasta el próximo capítulo? Ok.... si tan sólo saliera ya.